¡Una de las metas más importantes de estar vivo es disfrutar la vida! Entonces, cuando contemplas un postre o piensas sobre desesperadamente necesario día no laborable, yo digo: ¡hazlo! Siempre que estés sano y feliz, de eso se trata la vida.
Dicho esto, es verdad que demasiado de algo bueno no es exactamente muy bueno para nosotros. Y aquí entra la historia de Pearl, la Jack Russell Terrier. Esta pobre perra superó un largo período de abuso por parte de su dueño, quien la sobrealimentó sin preocuparse por su salud.
Pasado cierto tiempo, el dueño la abandonó en una estación de servicio. Entonces fue que la encontraron los rescatistas, por suerte. Pearl estaba a un paso de la muerte debido a su exceso de peso. Pesaba unas enormes 80 libras, en oposición a las normales 13 a 17 libras para perros de su raza.
Entonces entraron en escena The Dog Networking Agents Inc. para salvar el día. Admitieron que normalmente hubieran aplicado eutanasia a un perro de ese tamaño, pero ese día tomaron una decisión diferente. En lugar de ello, implementaron una dieta estricta y un programa de ejercicios para Pearl. Esto la ayudó a perder alrededor de 1 libra por semana.
Después de un tiempo pudo reducir exitosamente su peso a la mitad, mientras vivía una vida feliz con sus dueños adoptivos. ¡Incluso inspiró a sus nuevos amigos del vecindario a perder peso y ponerse en forma!
Esta historia realmente asombrosa nos enseña dos cosas: una, ¡que, con trabajo duro y perseverancia, todo es posible! Y dos, que mostrar amor y ayudar a otros realmente puede hacer la diferencia en nuestra vida.
Mira el video de la muy mejorada Pearl abajo, y no dejes de compartirlo con tu familia y amigos.
