Su perro comenzó a actuar extrañamente, así que instaló una cámara para ver qué hacía la paseadora de perros

Todos los amantes de los perros saben lo importante que es para sus cuadrúpedos amigos salir a caminar.

No sólo necesitan esos paseos para hacer ejercicio y gastar sus energías, también los necesitan para poder hacer sus necesidades. Por ello es que los perros necesitan salir varias veces al día. Quiero decir, eso es a menos que prefieras que tu perro sufra accidentes dentro de tu casa. Si los has entrenado, los perros saben que no se supone que tengan que hacer un lío en sus casas, y hacen lo mejor que pueden para aguantarse y sufren hasta que alguien los lleva a un lugar adecuado.

Pero la gente no siempre puede estar con sus perros y es por ello que los servicios de paseadores de perros se han hecho muy populares.Como muchos dueños de perros, Shelly y su esposo están ocupados en su trabajo todo el día, así que contrataron a una paseadora de perros para garantizar que sus Yorkies tendrían sus muy necesarios paseos al baño. Durante meses todo pareció ir bien.

Pero entonces la pareja advirtió que sus Yorkies actuaban extraño y tenían accidentes ocasionales. Supieron que algo estaba mal, así que decidieron instalar una cámara de seguridad para ver que estaba pasando mientras ellos no estaban en casa.

Cuando vieron la grabación, Shelly y su esposo no podían creer lo que veían sus ojos. La paseadora de perros entraba a su casa y cambiaba las cosas de lugar, pero no paseaba los perros en absoluto. Había traicionado completamente su confianza. El esposo de Shelly confrontó a la paseadora de perros y ella admitió su transgresión. ABC Action News también la confrontó para intentar conseguir una explicación, pero ella no quiso aparecer en cámara.

¿El consejo de Shelly? “No confíen en nadie. Instalen cámaras, pidan registros de actividad y fotos. Sencillamente hagan que cualquiera que ustedes contraten se haga responsable”.
Mira el video de abajo y comparte esta historia para ayudar a los dueños de mascotas a estar alerta cuando confíen a sus cuadrúpedos amigos a otras personas.