Una vaca no puede dejar de llorar por su bebé perdido. Cuando aparece por la cerca, ella pierde el control.

Siempre hemos sabido que el vínculo de una madre con sus hijos es lo más fuerte que puede haber. Las madres son esas personas especiales en la vida que tienen esa fuerte conexión contigo, y sus instintos maternales jamás pueden ser subestimados. Es justo decir esto tanto de humanos como de animales.

Por ejemplo, cuando el ganado es separado de su familia, especialmente sus hijos, puedes sentir claramente la angustia que sienten estos animales por sus reacciones. Karma, una vaca acongojada, comparte una historia similar.

Karma fue rescatada por el santuario animal The Gentle Barn (El Granero Amable), pero los rescatistas no sabían que sus dueños anteriores habían ocultado un gran secreto de ellos. Karma tenía un bebé llamado Mr. Rojas, de quien los trabajadores del santuario jamás supieron. Los dueños anteriores ocultaron a Mr. Rojas de ellos para poder vender el ternero luego de que se fuera Karma. La vaca madre estaba desgarrada por ser separada de su bebé, y se la escuchaba llorar por la noche, buscando frenéticamente a su hijo. Fue entonces que los trabajadores del santuario decidieron hacer algo al respecto.

Los trabajadores regresaron a donde Karma había sido rescatada y exigieron que el bebé fuera entregado a ellos. Cuando finalmente lo llevaron al santuario, con el remolque que estaba transportando a Mr. Rojas, Karma supo que su bebé estaba en el remolque. Inmediatamente se anima y comienza a llamarlo, y cuando lo ve afuera, el sonido que hace te hará sentir tanto feliz como triste.

Mira esta hermosa reunión en el video de abajo. Y si disfrutaste esta historia tanto como nosotros, ¡no olvides compartirla con tu familia y amigos!